“Porque lo que el hombre piensa dentro de sí mismo, así es”. Proverbios 23:7

El hombre es producto de sus palabras y de lo que ve. Muchas personas han producido cosas malas porque las han mantenido delante de sí. Entonces como hombre produce lo que ve y lo que dice su boca.

La escritura anterior dice que lo que un hombre piensa en su corazón, así es él. ¿Cómo son tus pensamientos? Niégate a meditar sobre el fracaso o tus miedos. Concéntrese en la Palabra de Dios. Tus pensamientos deben alinearse con el destino que Dios te ha llamado a vivir.

La Biblia contiene los pensamientos de Dios para nosotros y muchos asumen que sus planes no son para prosperarnos y algunos asumen que Dios no desea que vivamos una buena vida. La Biblia dice: “Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin esperado. Jeremías 29:11.” Los pensamientos de Dios hacia nosotros están escritos en la Biblia y cuando meditamos en la palabra de Dios, hacemos que nuestra mente se alinee con estos pensamientos.  

La biblia es el único manual que Dios le ha dado al hombre para entender su mente y ayudarlo a relacionarse con su Espíritu. Tus pensamientos nunca podrán ser lo suficientemente perfectos para pintar el cuadro de la vida que Dios desea que vivas. Por eso necesitas la palabra de Dios, dentro de ella está el tú que él creó antes de que fueras formado en el vientre de tu madre. Jeremías nació como profeta y aún antes de nacer, Dios tenía un plan para él y de esa misma manera antes de que fueras formado en el vientre de tu madre Dios te conoció y te dio un propósito.

Dios desea que prosperéis y sus caminos son más altos que nuestros caminos y sus pensamientos más altos que nuestros pensamientos. A veces muchos asumen que el propósito de Dios puede limitarlos, pero el propósito de Dios tiene una ventaja mucho mayor. Imagínese que Jeremías nació como sacerdote, sí, seguramente su oficio como sacerdote habría parecido similar al de un profeta, pero había una diferencia y no estaba solo en el título sino en el papel y el impacto que tendría en su nación. ¿Cuáles son los pensamientos de Dios para usted y qué ha hecho para realizarlos y manifestarlos en su vida diaria?

El hombre ha comprendido el principio de que sus pensamientos y palabras dirigen su vida. Pero yo diría que cualquier cosa que se haga fuera de la palabra de Dios es vanidad. El hombre nunca podrá vivir una vida plena fuera de Cristo Jesús. David entendió esta revelación, por eso escondió la palabra de Dios en su corazón. No basta con hablar positivamente y tener los pensamientos correctos. Los pensamientos que debes manifestar son sus pensamientos para ti y tu vida. Hoy permite que la palabra de Dios llene tu corazón y tu mente, para que pueda perfeccionar tus pensamientos. 

Dios lo bendiga